La familia crece... En cultura...

Tardaba en escribir, pero la vida se vuelve cada día un poco más plana y el semidesierto sólo produce alucinaciones o la muerte por falta de agua...

Poco cambia de un día a otro. Pequeños son los detalles que al protagonista le hace la vida diferente y casi siempre un poco peor. Insignificantes sucesos que nos exasperan y nos hacen reflexionar si vamos por el camino correcto. Esas minucias no son dignas de ser contadas, sobre todo porque quien escribe lo que desea es que lo lean. Contar lo que a uno le gustaría que le contaran puede no tener interés para los que nos leen. Quien dice que escribe para sí mismo o no es leído por nadie o miente para justificar la falta de éxito en las ordas de lectores.

Mi habitual tono irónico y humorístico es difícil de alcanzar, porque los temas y los sucedidos que cuento, no son más que escenas reales que nuestra imaginación novela convenientemente para que resulten entretenidos.

Ya sabemos que Murphy es un tío que no yerra en sus vaticinios. "Si algo puede fallar, fallará". Estoy en una lucha personal por perder el gran número de kilos que me sobran. Mi fase actual es "deporte por prescripción facultativa". Es decir, estoy gordo de cojones y tengo un problema grave de vestuario. De nuevo no me puedo abrochar ninguno de los pantalones que tenía, excepto aquellos que me compré el verano pasado cuando estaba en los 82 kilos... De nuevo he tenido que comprar pantalones, esta vez de la talla 44, no ha hecho falta que los comprara de la 46, ya es un mérito. Tras bajar de los 82 a los casi 69, en seis meses he vuelto a los 79. Como bien esperáis, no se ha tardado mucho en tomar medidas drásticas. Me he apuntado a un gimnasio, gratuito claro, que estoy rescatado por el FMI y me he puesto a correr 10 km. casi diarios, pues como Murphy es un invitado principal en mi devenir diario, no consigo repetir el gimnasio y la carrera más de dos días seguidos. Intento no ver a nadie y así me, como dice el de la canción: "¡Me estoy quitando, me estoy quitando, ya sólo me meto de vez en cuando!", con lo que mi ingesta de cervezas y tapas la estoy limitando dentro de lo posible, pero ya me conocéis, tengo la excusa perfecta, "¡Soy un bebedor social!. 

Tras largas tareas de sacrificio, gimnasia y carrericas, mi cuerpo agradecido me ha premiado como el sabe que me gusta, como me merezco, con el gusto de quien aprecia a su dueño, me ha cambiado el peso de 79 a 79,600, lo que digo: "¡P'á matar al enanico que regula el peso dentro de mi cuerpo!". El caso es que me estoy dando una tunda de pesas y ya le he bajado cuatro minutos al circuito de 10 km. que me he puesto como dieta diaria... Ya me lo estoy cargando en 56 '.

Por otra parte mi vida ha tenido un acontecimiento importante en estos últimos días. Mi Pablete se ha hecho un hombrecico... ¡No, no le ha venido la regla, ni ha echado su primer polvo...! De ambas cosas uno nunca puede estar seguro, pero la primera es probable que sea cierta y la segunda, por su salud mental y física, espero que aconteciera algunos años atrás. Mi zagalico se ha Licenciado en Odontología. El nenico se ha cargado los cinco años de carrera a la primera, sin suspensos en toda la carrera y encima con buenas notas. Estamos muy orgullosos todos de él ya que es el primero de la familia que no se ha licenciado en la cárcel. Ya sabéis que yo terminé la carrera, además de alguno más de la familia en la cárcel y no pudimos ir a la entrega de becas, puesto que estudiamos con total falta de vocación, sólo alentados por los beneficios penitenciarios como rebaja de pena por estudios, que nos proporcionaba la actividad... Es triste pero es cierto. Así que podemos afirmar que "el Pablete" es el primer Garbanzito que es Licenciado, de verdad, sin dobleces ni vergüenzas que esconder...

Fue muy emocionante pues además leyó, junto a una compañera, el discurso de fin de curso y lo hizo para regocijo general y orgullo paternal de forma brillantísima, divertida, no demasiado larga y muy amena... Muy al estilo Garbanzito, pero con la fuerza, la pujanza y la cultura que al patriarca de la saga le falta...

El viernes recibí una llamada del Mago Pepo... Se le escuchaba mal y se le entendía algo menos... Al leer su blog ya me he enterado porqué... Estaba en alta mar bebiendo "don pedritos" y entre las olas y los "don pedritos", no estaban las circunstancias para realizar una comunicación de calidad televisiva. Me alegro Pepo de tu llamada, lamento que pudiéramos hablar tan poco. Prometo llamarte, sabes que hablar por teléfono me cuesta tanto como a los vampiros comer ajo, pero haré el sacrificio de coger el teléfono y marcar.... El hablar contigo nunca es un sacrificio, sino un gran placer. Las regatas de barcos deben ser divertidísimas... pero de yo de barcos sólo conozco el requiebro ese que dice: "Los propietarios de barcos tienen dos días de máxima felicidad en su vida... El día que lo compran... y el día que lo venden..."

Por último gracias a todos los que de una forma u otra me habéis hecho llegar vuestro apoyo y deseos de ayudarme...

Gracias, el mayor tesoro de una persona son sus amigos... Lástima que yo os cuide tan poco... Pero no me lo toméis como una ofensa, es simplemente una forma de ser que debéis perdonarme si de verdad me apreciáis.... De nuevo gracias a todos.