lunes, 4 de enero de 2010

¡Qué cambio!

¡Oye!, qué desde que hablé con mi chinica,la vida me ha cambiado... ¡No hay como tomar las cosas de otra manera para que hasta el humor te vuelva!. Ya sabéis como era mi relación con la tía... Sólo quería exprimirla, sacarle todo lo que llevaba dentro... Qué si gritos, que si sofocos, que si jadeos... Qué ahora que nos tomamos nuestra vida sexual de otra manera, la vida me ha cambiado...

Antes sólo cogía la china y aquí te pillo y aquí te mato. Un mete y saca como decían los de la "Naranja Mecánica" o un "rapidillo", como me sugería una vecina que tenía y que al parecer siempre tenía prisa... Qué antes me trajinaba a la chinica y sólo quería ponerle las pulsaciones a 200 y las mías ¡Claro!. Qué ahora todo es más reposao... Antes era el montarla y meterle un empellón que produjera 2000 watios de potencia. ¡Qué estaba empeñao en electrificar toa la región!. A punto estuve de dejar sin trabajo a toa Escombreras... Qué es que me decía la china: "Oye, ¿tú quieres hacerme "gosar" o desmocharme como un espolsaor?. ¡Qué ni hablábamos ni ná!. Ahora tenemos largas conversaciones, tan interesantes que hasta tomo apuntes y hago fotos con el móvil, con el fin de poder transcribirlas aquí más tarde... ¡Qué ya tengo notas para cuatro o cinco entradas más!. 

La relación con la oriental me ha cambiado el sexo y también me ha cambiado una pequeña parte de la vida... ¡Qué estoy con mejor humor y todo!... De todas formas... A mí la chinica que me da la vena que algo me está ocultando... Mira que no hago más que decirle que vaya despacico y que sobre todo no me toque en ya sabeis que parte... Me la tengo por su culpa declarada zona catastrófica y ruína inminente y la muy ladina... ¡Zas,. En cuantico que me descuido... ¿A qué no adivinais a donde va la manica?. Pues como todas las manos. ¡Al pan!. Oye, qué me revuelve las bolas de los ojos y me las deja en blanco... ¡Qué me deja pasaico, con las cariciquias de la leche!. ¡Qué se me queda la parte de atrás con el mismo diámetro que el ojo de una aguja!. Mira, me entra tal dolor en tó el escoriamiento, me da un arrebato de tan mala sombra, que si no fuera porque me tiene el seso y el sexo comío, la dejaba allí mismo, compuesta y ... ¡Vamos, qué no la dejo toa prepará porque estoy obsesionao con su cuerpo!. ¡Que mal humor me entra!. ¿Pues no te he dicho que por ahí ni me roces?. Le espeto iracundo. Igual lo hace para que la deje... ¡Arreglá va, pues no le tengo vicio yo a la chinica ni ná!.


Nuestra relación ha cambiado. Antes con la chinica iba más al ligoteo... A lo fácil, a lo mundano... A las relaciones modernas: ¿Cómo te llamas?... ¿Practicas el sexo sin compromiso?... Ahora no. Ahora charlamos y damos largos paseos... Sacamos temas de interés o sin ninguno, pero que a los dos nos hacen pasar el tiempo... Despacio... Sin prisas... Lo nuestro más que ligoteo es cortejo... Pero nada de rondar o ronear, como se dice ahora... Cortejo de esos de que te presentan al padre y le pides permiso para acompañar a su hija con fines honestos... No como ahora, que si le dices a una zagalica: "Tus ojos reflejan el azul del mar cuando su agua templada acaricia la playa". Vamos, pá decirle que tiene los ojos más verdes y más rebonicos que has visto en la vida... La nenica se agarra al brazo de la amiguica que lleva a su diestra y le susurra al oido con aire misterioso: "¡Jenny, vámonos pitando que este tío es raro o maricón!. ¡No ha dicho no se qué de mis ojos y no me ha mirao las teticas ni de soslayo!". Qué es que la chiquillería de hoy en día no está acostumbrá a los noviazgos de antaño... De esos que tenías que ir al parque con la hermana pequeña y tó... 


En fín. Qué mi vida sexual ha dado un vuelco... Qué con los años se puede disfrutar de la amante de otra manera...


Hoy no he sacado a pasear a la chinica... El del tiempo nos ha avisao que iba a hacer "malo" y no he querío despertarla para que luego la muy terca se negara a que yaciera con ella., Además,  mi santa me ha susurrado con mucho criterio: ¡Qué hoy no es finde... Aunque estés de vacaciones!. Directamente me he ido a darme lo que ella no me iba a dar en solitario... Al monte, por las sendas y romas colinas que rodean mi pequeña cueva... No creas. Solico y también me he enrojecido un poco más "tó lo mío"... ¡Qué le vamos a hacer!. Practicar en soledad también es doloroso...


P.D.: No he practicado el onanismo... Me he ido a correr 12 kilómetros por el Coto Cuadros, que tós los días no se puede abusar de la chinica... Y sí, sigo gordo... ¡No te jode!.

2 comentarios:

XARLI dijo...

Hombre, ¡el niño perdido en el templo vuelve a dar señales de vida!... ¡y de qué forma! ¡qué bríos! ¡cuanta literatura y gurrufalla! ¡como a mí me gusta, ja,ja! .... ¡¡¡SE ACABÓ EL ABURRIMIENTO QUE HA VUELTO GARBANZITO!!!

stani dijo...

Xarli, deja que pierda peso que en la Guapada después de Santa Pola lo vamos a poner otra vez en los 80, pero no los de la movida madrileña sino los de la báscula, jajaja.